•Injusto que al productor
nacional se le pague a 6.20 mientras al producto de importación se le paga a
8.50 pesos litro
•Han desaparecido más de
500 mil unidades productivas
Comunicado.
La revisión que
pretende el gobierno norteamericano del TLCAN, podría poner fin al sufrimiento
de los productores nacionales de leche que, después de la firma de dicho
tratado, los obligó a competir en circunstancias de desigualdad ante una
apertura indiscriminada de leche y sus derivados, señaló Álvaro González Muñoz,
presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche.
Este esquema,
“que ya lleva más de 22 años, provocó un injusto desplazamiento de los
productores nacionales, obligándolos a vender su producto por debajo de los
costos de producción.
“El mismo
fenómeno comercial, añadió, es la causa de la desaparición de más de 500 mil
pequeñas unidades productivas. Miles de familias fueron empujadas a la
emigración y destrucción de una infraestructura que venía de varias generaciones”,
consideró González Muñoz.
“Los pequeños y
medianos productores de leche tenemos la necesidad de que LICONSA y la
industria de lácteos compren el producto a precios justos. Esto, derivado del
alto valor de las importaciones de leche en polvo debido a la paridad cambiaria
peso-dólar y, por otro lado, como consecuencia de la exigencia del mandatario
norteamericano Donald Trump, de revisar a su favor el TLCAN.
“Quienes deben
preocuparse más en estos momentos, dijo Álvaro González, son los productores y
exportadores norteamericanos”. Ellos tendrán que buscar quién les compre sus
‘fórmulas lácteas’, suero enriquecido con proteínas, vitaminas y minerales
artificiales, y leche en polvo que nos llega sin el nutriente fundamental
natural, que es la crema”.
Álvaro González
Muñoz se reunió con líderes de productores lecheros, a quienes hizo un llamado a
cerrar filas en momentos en que la economía del país enfrenta serios problemas
pero que, para los productores de leche, con trabajo y esfuerzos adicionales,
podrán convertir en oportunidades.
Comentó el
dirigente que, “si el gobierno mexicano apoyara al sector lechero protegiéndolo con un impuesto especial a los
productos lácteos de importación, los productores nacionales tendrían la
capacidad de generar alrededor de 100 mil empleos en los próximos años y un
valor adicional de capitalización de establos”.
Por otra parte,
Álvaro González expresó que la empresa LICONSA, sectorizada en SEDESOL, deberá
ajustar al alza sus precios de compra de leche nacional, ya que el litro en el
mercado internacional se cotiza a 8.50 pesos y así compra la mencionada empresa
el producto de importación. A los productores nacionales les paga 6.20 pesos el
litro de leche fresca, natural y de la mejor calidad.
Propuso que si
realmente el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto tiene deseos de apoyar
al sector productivo, en particular a los pequeños productores que representan
alrededor del 90 por ciento a nivel nacional, bastaría con dar sus
instrucciones a la empresa LICONSA para que pagara 8.50 pesos por litro a los
productores nacionales, para estar en igualdad en la competitividad.
Esta medida
sería el factor que revertirá el daño hecho durante muchos años al sector
lechero nacional, propiciando un crecimiento sano de la lechería nacional para
beneficio de miles de connacionales, además de que se incentivaría la inversión
que sin duda abriría a México nuevos horizontes en lo económico y social en
breve tiempo.
El dirigente
comentó que los pequeños productores lecheros no descartan movilizaciones en las
plantas que siguen pagando a los productores por debajo de los costos de
producción, y aclaró que en este momento todos los mexicanos debemos hacer un
frente común con el gobierno federal, para sacar al país del hoyo en que se
encuentra.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario