Por:
Cristóbal Ramos Solórzano
‣Manuel
Velasco ya no regreses, en Chiapas te repudian por tu mal gobierno.
Enfermo de poder, el
exgobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello pretende regresar a la
gubernatura para concluir su desgobierno a pesar de las severas críticas que ha
recibido de parte de los chiapanecos.
Al buen entendedor, pocas
palabras y en este caso Velasco Coello debe saber que el repudio hacia su
persona va creciendo y es mejor que no regrese.
Existen muchos agravios a la
sociedad chiapaneca que no está dispuesta a seguir permitiendo caprichos de un
político que solo se benefició junto con su familia y dejó un estado sumido en
la pobreza, según revelan estudios socioeconómicos.
Los senadores hoy en funciones,
principalmente del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) deben
poner un hasta aquí a Manuel Velasco Coello y fincar responsabilidades por
presuntos desvíos de recursos destinados a esta entidad, aquí se verán de que
están hechos los diputados y senadores que tienen la mayoría en las dos
cámaras.
De no ser así, estaríamos
hablando que es más de lo mismo, que ese cambio verdadero no existe, que se
sigue protegiendo y solapando a los corruptos.
Y es que, en Chiapas la
independencia de poderes no existe, el poder ejecutivo mantiene sometido a los
poderes legislativo y judicial y hacen lo que el gobernante en turno ordene y
eso está pasando en Chiapas al manipular reformas a la Constitución local a
modo para que Manuel Velasco regrese a la gubernatura de Chiapas.
Sectores como la Coparmex en
Chiapas y la Sociedad Civil organizada, se han pronunciado porque se respeten
nuestras leyes y se actué dentro de un marco de democracia y legalidad.
Me permito retomar el documento
que hiciera entrega el periodista Vinicio Portela Hernández ante la instancia
de la Procuraduría General de la República donde solicita inicie acción de
inconstitucionalidad donde señala lo siguiente:
“En dichas modificaciones el
Congreso del Estado sobrepasó sus atribuciones ya que con la figura de SOBERANA
pretende que el ciudadano MANUEL VELASCO COELLO sea nombrado Gobernador
Sustituto, luego de renunciar al cargo de Gobernador Constitucional el pasado
28 de agosto de 2018”.
En la Reforma a la Constitución
de Chiapas, el Congreso del Estado de Chiapas hace una excepción para ser
Titular del Poder Ejecutivo:
Continúa Portela Hernández que
el Artículo 52 señala Requisitos para ser Titular del Poder Ejecutivo:
VI. No haber ocupado
anteriormente el cargo de Gobernador o Gobernadora por elección popular; lo
anterior se exceptúa, cuando se trate del mismo periodo por el cual ejerció el
cargo, en cuyo caso, no tendrá que rendir la protesta a que se refiere el
artículo 54 de esta Constitución.
Ante esta modificación a la
Constitución Estatal contradice el mandato del Artículo 116 de la Carta Magna,
en su Fracción I, párrafo segundo:
Los gobernadores de los Estados,
cuyo origen sea la elección popular, ordinaria o extraordinaria, en ningún caso
y por ningún motivo podrán volver a ocupar ese cargo, ni aun con el carácter de
interinos, provisionales, sustitutos o encargados del despacho.
Es por ello que la modificación
del Artículo 52 de la Constitución de Chiapas se extralimita y no respeta la
supremacía de ley que indica claramente y sin interpretaciones ambiguas que en
ningún caso y por ningún motivo podrá ocupar el cargo de Gobernador alguien que
ya lo fue por elección popular. Así o más claro.
Pero al margen de lo que
estipulan las leyes, existe un repudio generalizado de la ciudadanía por la
opacidad y falta de transparencia del actual gobierno y lo que busca Velasco
Coelli es cubrirse las espaldas para no ser llamado a cuentas una vez que se
elimine el fuero.
Por esto y muchas cosas más, es
mejor que no regrese este saqueador, el peor gobernador de la historia de
Chiapas. El nuevo gobierno federal que encabezará Andrés Manuel López Obrador,
no deberá prestarse a proteger y ser cómplice de gobernadores RATAS.
Rutilio Escandón Cadenas,
gobernador electo de Chiapas, sabe perfectamente la situación actual que impera
en la entidad, donde prevalece una crisis económica propiciada por el gobierno
corrupto que va de salida y que merece ser enjuiciado, de lo contrario será
también cómplice. Veremos qué pasa, o tal vez será borrón y cuenta nueva.
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