A
PEÑA NIETO LE TOCÓ Y LO VA A HACER
Por
Armando Rojas Arévalo
FRANCISCO:
MANLIO FABIO BELTRONES –quien casi nunca se equivoca al revelar sobre los
convenios a que llegan los partidos dentro del Pacto por México- dice que la
Reforma energética sale este año. Empero faltan 8 sólo sesiones del Congreso
para terminar 2013, y aun no entra a discusión la Reforma
Político-Electoral. Si bien es cierto
que hay consenso del PAN y PRD con el PRI en los asuntos torales de la
iniciativa, GENARO BORREGO y los calderonistas quieren reventar los
compromisos.
La
reforma electoral, cuya discusión y aprobación fue, como sabes, la
condicionante que pusieron PAN y PRD para pasar a la reforma energética, está
casi lista y debe entrar ya al protocolo del análisis y la polémica en la
Cámara. Aunque, como he dicho, prácticamente hay consenso de los partidos la
discusión puede ocupar una o dos sesiones más.
Por
vía de mientras, el Senado dice estar listo para presentar esta misma semana el
dictamen de la reforma política. Entre los puntos de acuerdo de los partidos en
el Pacto por México, están, como te los revelé hace unos días: la creación del
Instituto Nacional Electoral, el rebase de los gastos de campaña como causal de
la anulación de la elección para quienes incurran en ello, y otorgar el 50 por
ciento de los cargos de elección por género.
Entre
los puntos donde la negociación está atorada, se encuentra el de la segunda
vuelta electoral. Al PRI no le gusta.
En
este sentido el tiempo ya está encima y veo difícil que la reforma energética
salga en lo que resta de este año. Aunque, como sugiere CÉSAR CAMACHO,
presidente del comité nacional del PRI, podría
haber un período extraordinario para ello.
Las
deliberaciones en torno a reforma energética no serán nada fáciles. El PRI
propone contratos de producción compartida y la modificación del artículo 27
Constitucional; PAN busca la apertura total de PEMEX, lo cual en buen cristiano
significa la privatización del sector energético, y el PRD dice no a la reforma
del citado artículo; es más, pide que antes de que entre a discusión en el
Congreso, se realice una encuesta nacional para ver qué quiere el pueblo de México.
El
escenario es difícil y complicado. Una reforma energética con cambios a la
Constitución requeriría los votos de dos terceras partes de cada cámara
legislativa. Tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, una alianza
PRI-PVEM-PANALPAN alcanzaría esa mayoría calificada, por más brincos y
sombrerazos que diera el PRD. Claro, al PRI le interesa que todo salga lo mejor
posible, sin raspaduras, y ya cabildea con el PRD el voto aprobatorio de la
bancada de éste ofreciéndole no modificar el 27 Constitucional.
Como
sea, con o sin modificación constitucional, aunque sólo sea una asociación de
capitales, la reforma petro-eléctrica es
regresiva; sin embargo, es un proceso que lleva ya varias décadas. Hay que
decirlo aunque uno no lo desee, la propuesta no es exclusiva de PEÑA NIETO,
aunque a él le tocará ponerla en operación.
En
1994 se realizó en la ciudad de México el Seminario de Teoría del Desarrollo
con los auspicios de la UNAM. En el evento, el consultor estadounidense MICHAEL
TANZER recordó que a fines de l969 el Wall
Street Journal ( artículo de JOHN SAXE FERNÁNDEZ en “Gaceta Políticas”,
octubre 2013) destacaba el recelo de los altos gerentes petroleros de Estados
Unidos de que “el monopolio petrolero nacionalizado” de México “es tan exitoso
que preocupa a las firmas de la industria”, porque temen que otros países sigan
el ejemplo de PEMEX”, en virtud de que por su eficiencia puede dañar las
operaciones petroleras privadas en el resto de América Latina y el Medio
Oriente.
Esos
“éxitos” que infundían recelos en los grandes consorcios petroleros
norteamericano, eran los grandes descubrimientos de yacimientos como el campo supergigante de
Cantarel (entre los mayores del mundo) y el desarrollo petroquímico de México.
Los
consorcios norteamericanos no querían –ni quieren- que una empresa tan exitosa como PEMEX se convirtiera
en modelo para países que se inclinaban por nacionalizar su petróleo. Como
consecuencia de esta inquietud, el Banco Mundial puso en marcha un programa
para desactivar PEMEX. El fin de este programa, reveló la revista Bussiness Week, era abrir el petróleo de México
para que empresas norteamericanas puedan explorar y localizar yacimientos,
obtener un porcentaje de las extracciones y después participar en la
administración del negocio.
También
hay que decirlo: la idea de PEÑA NIETO encuadra bien en ese programa de
desarticulación planteado por empresas consultoras norteamericanas (Cambridge
Energy Associates y McKinsey, Bozz Allen & Hamilton, ésta última asesora
del Pentágono y de la Agencia de Seguridad Nacional) y fundaciones L’Heritage,
que proponen la desnacionalización de todas las actividades “corriente arriba”
(exploración, producción) y “corriente abajo” (refinería, petroquímica,
distribución y comercialización a favor de las “hermanas mayores” Exxon Mobil,
Chevron-Texaco Amoco y Shell.
Ése
es el intríngulis. Que no nos vengan con que la gasolina va a costar menos, que
la electricidad será más barata, que la reforma impulsará el desarrollo
nacional. Ya estamos grandecitos.
TAMBIEN
TE LO DIJE EN SU MOMENTO.-Ayer domingo el Congreso Nacional del PRD en
Oaxtepec, Morelos, aprobó por unanimidad quitar el candado que prohibía la
reelección de dirigentes (artículo 107 de los Estatutos del Partido), y dispuso
que la reelección puede ser hasta después que haya transcurrido un período de
haber cesado las funciones del dirigente. En otras palabras, no en el período
inmediato.