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martes, 18 de noviembre de 2014

PROMUEVEN LA CONSERVACIÓN DEL MAÍZ CRIOLLO EN LA RESERVA DEL VOLCÁN TACANÁ.

· Más de 60 variedades del grano existen en México; Chiapas posee aproximadamente la mitad de ellas.
            Laura Ruiz Espinosa.
            Cacahoatán, Chis; NOV. 18 (interMEDIOS).- A través del Programa de Conservación de Maíz Criollo (Promac), la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) promueve la conservación y recuperación de razas, así como variedades de maíz criollo y sus parientes silvestres en sus entornos naturales en la Reserva de la Biosfera Volcán Tacaná en Chiapas.
            El Director de la Reserva del Volcán Tacaná, Francisco Javier Jiménez González señaló que el maíz sigue y seguirá como un alimento básico e insustituible para la humanidad, donde se llegan a cultivar miles de hectáreas entre dos ciclos agrícolas, primavera-verano y otoño-invierno; de tal manera emplean los diferentes sistemas de cultivo de acuerdo a las regiones y costumbres en apoyo a los campesinos dedicados a ésta actividad.
            “La Conanp promueve la conservación en comunidades rurales del maíz criollo mediante el apoyo de proyectos, estudios técnicos y cursos de capacitación que permitan la preservación y recuperación de sus poblaciones; también impulsa actividades de conservación de las especies de las razas silvestres del maíz a través de proyectos orientados al mantenimiento, recuperación y monitoreo de sus poblaciones, que reviste la mayor importancia para los chiapanecos”, sostuvo.
            Explicó que el maíz criollo es importante, además por los registros históricos que del cultivo de la gramínea hay en la entidad donde según los datos en México existen 64 variedad de maíz y Chiapas posee al menos la mitad de ellos; de ahí el interés de conservar y aplicar el programa que logra convertir en una herramienta vital en busca de una agricultura sustentable.
            Jiménez González reconoció que es muy importante proteger los recursos naturales, además de brindar campos laborales a las personas que habitan en las comunidades colindantes en las áreas naturales protegidas, donde año con año realizan la feria del maíz criollo para poder presentar platillos y bebidas derivadas del grano como lo son atole, tamales, tortillas, refrescos, guisados, entre otros. (iM rrc).

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