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jueves, 14 de marzo de 2019

MALOS HÁBITOS PARA DORMIR, UNA PESADILLA: IMSS


Los trastornos del sueño pueden llegar a ser tan graves que incluso son capaces de poner en riesgo la vida, conseguir un descanso reparador es necesario para prevenir diversos problemas de salud; así alertó Francisco Velázquez Robledo, neurólogo adscrito al Hospital General de Zona (HGZ) No. 1 del IMSS en Tapachula, en el marco del Día Mundial del Sueño a celebrarse este 15 de marzo.
Quien amplió que algunas de las alteraciones que puede presentar una persona que no logra dormir bien o duerme pocas horas pueden ser desde irritabilidad, afectación en las capacidades cognitivas, de memoria, problemas mentales y emocionales, depresión, hasta padecimientos crónicos.
“Dormir bien ayuda al cerebro a retener información, brinda el buen funcionamiento del sistema cardiovascular, contribuye al control del peso ya que mejora el metabolismo, y contribuye al buen humor”, refirió el especialista del Seguro Social.
Velázquez Robledo explicó que malos hábitos perjudiciales para el sueño son acostarse a una hora distinta todos los días, hacer siestas diurnas y dormir entre demasiada luz o ruido y otros factores que imposibilitan un descanso reparador son pasar demasiado tiempo en cama despierto, no hacer suficiente actividad física y ver televisión o utilizar la computadora o el teléfono celular en la cama.
Comentó que la hormona de crecimiento se genera durante el sueño es por ello que es importante que los infantes duerman entre 10 y 11 horas seguidas durante la noche. En el caso de los adultos, lo recomendable es dormir de 7 a 8 horas diarias para conseguir un buen descanso, sin embargo este rango puede variar en cada persona de acuerdo a sus actividades y necesidades.
Algunas de las causas de no conseguir un buen descanso pueden ser los trastornos del sueño los cuales pueden ser insomnio o apnea, así como diferentes causas que pueden ser emocionales, respiratorios o neuronales.
Finalmente el especialistas del IMSS destacó como principal recomendación tener una rutina antes de dormir de acuerdo a cada persona como establecer horarios, apagar luces, tomar un baño antes de dormir,  cenar ligero, evitar actividades como ver televisión o cenar en la cama; así mismo exhortó visitar al médico para detectar algún tipo de trastorno del sueño y recibir el tratamiento adecuado.

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