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lunes, 11 de febrero de 2019

OPINIÓN PÚBLICA// LIBERAN VÍA PÚBLICA


                                                   Por: Gonzalo Egremy
                                               LIBERAN VÍA PÚBLICA
         +Comercio informal, llámese ambulantaje o semifijos, ha sido, una mina de oro para liderzuelos que hoy ven que se les acaba el negocio.
         +Faltan muchas calles, banquetas y hasta jardineras por ser reordenadas en el comercio semifijo, como ya se hizo en la 6ª, 8ª y 10ª avenida norte.
         .- El comercio informal en la vía pública, principalmente en el centro de la ciudad, es un lucrativo negocio del que obtienen ilícitamente millonarios recursos, varios líderes, por la venta y renta de espacios.
         Lo anterior ha sido un secreto a voces, y durante años ha habido toda clase de señalamientos en ese sentido por parte de dirigentes del comercio establecido o Cámaras, empresarios y organizaciones de la sociedad civil.
         Enrique Mota Ymatzú, titular de la Secretaría de Servicios Públicos, en entrevista publicada en este rotativo hace unas semanas, reconoció la grave problemática en el rubro.
         Aun cuando ofreció diálogo con dirigentes de diversos grupos del comercio informal, la mayoría no acudió bajo el argumento de que “tenían pagado permiso” desde septiembre 2018 (cuando concluyó la administración municipal que encabezó Neftalí del Toro).
         En la entrega-recepción con el actual Ayuntamiento Municipal, informó, no fue dado los padrones o listados de los diferentes grupos de comerciantes informales, y mucho menos los recibos de supuesto pago a tesorería del gobierno anterior.
         Ante ello, dijo, y con la participación de comerciantes establecidos y agrupados en Cámaras, se diseñó un programa de reordenamiento de las calles y avenidas alrededor del parque Central “Miguel Hidalgo”.
         En enero, la autoridad retiró a todos los vendedores ambulantes y semifijos de la 6ª y 8ª avenida norte, así como de la 1ª, 5ª y 7ª calle poniente.
         Y ayer domingo, retiraron a comerciantes que por años se habían apoderado de la 10ª avenida norte entre 3ª y 5ª calle poniente, frente al mercado “General, Sebastián Escobar” o atrás de la iglesia de San Agustín.
         “El reordenamiento del primer cuadro de la ciudad, continuará, y la vigilancia para que no vuelvan a establecerse los comerciantes informales, será permanente”, comentaría.
         Y es que ya no se podía transitar por esa 10ª avenida norte; mientras muchísimos locales al interior de los mercados “Sebastián Escobar” y “5 de Mayo”, se encuentran vacíos.
El comercio informal aparte de que era un obstáculo para el tránsito peatonal y automovilístico, frenaba la modernización y embellecimiento de los edificios, casas y empresas comerciales.
Decíamos que para nadie es secreto que en ese rico filón de oro (ambulantaje y semi-fijos) liderzuelos cobijados en las siglas del PRI, PVEM y PRD (prometían votos a los candidatos en épocas electorales) y lograban “amafiarse” con los que llegaban al poder y compartían el ilícito jugoso negocio de vender y rentar espacios públicos.
         El PRI fue el partido corporativo desde donde se escudaban vendedores de la calle, así como “cuna” y gran beneficiario de los dirigentes del comercio informal, al grado de que hizo regidores a varios de éstos en los últimos años.
          A inicio de los 90’s otros “líderes” le disputaron a los priístas el negociazo, y hasta formaron sindicatos para presionar y obtener parte del botín.
         Amparados en las siglas de la CNOP, CTM, CROC, COR y demás, utilizadas por los liderzuelos para acrecentar sus negocios de la venta callejera, aparecieron para quedarse “organizaciones” de vendedores amparados en el PRD y en los últimos años en el PVEM con la hoy ex regidora y ex síndico, Rosario Vázquez Hernández.
         La venta y renta de espacios en las banquetas, calles y avenidas de Tapachula es un millonario negocio de no más de diez “capos” que controlan a unos seis mil vendedores que les pagan semanalmente entre 400 y 800 pesos cada uno.
          Por ello los dirigentes de los vendedores ambulantes y semifijos son económicamente prósperos con casas, ranchos, carros y cuentas bancarias, algunos hasta lograron pagar caras campañas políticas en las últimas elecciones.
         El negocio de “los capos” del comercio informal mantenía al centro de la ciudad en un caos vial y peatonal.
         Regidores de Morena, dijeron que su deseo es contribuir con la sociedad tapachulteca, para regular el comercio informal, sin embargo, un par de sus homólogos en el ayuntamiento, protegen y amparan ese ilícito negocio que provoca insalubridad, caos vial y peatonal, evasión al Fisco, y competencia desleal al comercio formal.
          Para combatir ese mal, es necesario que el gobierno federal, a través de la SHyCP con su policía Fiscal-Aduanal, así como la FGR, Migración, Función Pública, Salud y Protección Civil realicen cuantas acciones, en el ámbito de su competencia, sean necesarias para someter al orden y control del comercio informal en otras calles más, y penalizar a los líderes, ¿no cree usted?//Salud

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