Imperativo que Velasco Coello
ordene el pago del fluido eléctrico consumido en el Hospital General de Tapachula, que independientemente, de
todas las irregularidades que se observan en este, como falta de insumos,
medicamentos, médicos especialistas, contratación de personal y equipamiento
médico, entre otros; el hecho que se cortara el suministro por la Comisión
Federal de Electricidad (CFE) como se vio amenazado, pondría en riesgo la salud
de los pacientes y la vida de los enfermos críticos del nosocomio, amén que
quedó al descubierto, que por la premura para inaugurar este Elefante Blanco
aun sin terminar, la Secretaria de Salud (SA) no efectuó el Contrato de
Servicio con la CFE, demandó José Francisco Aranda Tinajero, Coordinador
Regional de la Coalición Obrero Campesina Estudiantil del Soconusco (COCES).
Es grave que este día martes
27 de noviembre de 2018, personal de la paraestatal arribara con la finalidad
de suspender el servicio eléctrico por falta de pago del Gobierno del Estado de
Chiapas, que encabeza todavía Manuel Velasco Coello, y todo por incumplimiento
de pago de un régimen que se decía cercano a la gente y que aun pregona y
presume de finanzas sanas, cuando está en terapia intensiva financieramente y a
punto de sucumbir su mala administración.
Afortunadamente, agregó el
dirigente, familiares de pacientes alertaron a través del chat de la COCES y
las redes sociales, que se pretendía
dejar sin energía eléctrica al Hospital General de Tapachula, por lo que se
investigó la causa y quien había ordenado dicha acción, ya que se presumía que
por el paro de los trabajadores de salud, pero que atienden las urgencias, esta
era una venganza del odiado represor, por lo que para poner en claro lo que
sucedía, antes de pedir se omitiera su nombre un servidor de la paraestatal,
dijo que eran instrucciones de la superintendencia que dirige Jaime Santiago
Espinoza, pero obedecía a que el centro hospitalario tenía una deuda
millonaria.
En la Capital Chiapaneca, se
buscó contactos tanto de la Secretaria de Salud, Secretaria de Hacienda y del
Gobierno del Estado, no sin antes pedir que no se hiciera público sus nombres
por aquello de las represalias, y que se manejara que la información era
extraoficial, coincidiendo ciertamente
que el Presidente Peña Nieto presionó a Velasco Coello para inaugurar el
adefesio llamado Hospital General de Tapachula, y que indudablemente, no existía
el tal contrato de servicio y se había acumulado un deuda considerable, muy
cercana a los 9 o 10 millones de pesos, lo que no se sabía, era por no se
amortizaba.
Luego de sostenerles que sería
responsabilidad del Güero Velasco, abundó Aranda Tinajero, si se hacia efectivo el corte del abastecimiento
eléctrico, y se ponía en riesgo el daño a la salud y consecuentemente la muerte
de algún paciente crítico, fuera anciano, mujer o niño, por lo que pidieron
esperáramos su llamada; como fue: solo para decir “no se preocupen, ya se hizo
un pago parcial de una cantidad de dos millones 500 mil pesos”. Y adelantaron “pero exijan el pago
total porque a partir de ahora, ya no podremos intervenir”.
Insistimos, demandamos se haga
el contrato y se pague la cantidad total de dicha deuda, ya que los familiares
de los pacientes no pueden estar en la zozobra, de cuando sus consanguíneos
pueden estar en peligro de ver afectada su salud o de perder la vida, tan solo
porque está latente el corte de energía
particularmente, de
ancianos, mujeres y niños que son
más vulnerables, así como la contratación de especialistas como:
gastroenterólogos, ortopedista, urólogos, otorrinolaringólogos, neurólogos,
neurocirujanos, y otros, así como sanear las irregularidades como falta de
medicamentos, insumos, contratación de personal de enfermería y
administrativos, equipamiento médico, entre otros, acoto el líder de la COCES.
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