Por: Vinicio Portela
Qué estará haciendo mi amiga *Silvia Arely Díaz Santiago*, flamante
Coordinadora de Política Fiscal del Ayuntamiento Tuxtla Gutiérrez, que no pone
orden en el centro de esta capital chiapaneca.
El ambulantaje es amo y señor del primer cuadro de la ciudad, se vende lo
que sea, se consigue lo que quieran, mientras que el comercio formal sufre de
pérdidas de hasta un 60 por ciento de sus ingresos, lo que pone en riesgo miles
de empleos.
Pero el comercio informal, además de afectar severamente la captación de
impuestos, genera que otros delitos se reproduzcan rápidamente como es el
lenocinio, el narcomenudeo, la venta de productos apócrifos y el robo con
violencia, de los cuales inhiben la presencia de inversión y turismo a Tuxtla
Gutiérrez.
Díaz Santiago debe amarrarse muy bien las enaguas y poner mano dura al
comercio informal y dar alternativas para que el centro de Tuxtla sea un
orgullo y no un mercado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario