· Piden la renuncia de Puga
· Sufren pérdidas por 600 millones de pesos
· El panorama “de pronóstico reservado”, dice el
dirigente Álvaro González Muñoz
(Boletín).- “El panorama que nos espera para este año es de pronóstico
reservado debido a la sobreoferta de los sobrantes de productos lácteos en
algunos países, la desaceleración en las compras por parte de China y Rusia que
ha provocado la caída de los precios internacionales, y las consecuentes
pérdidas para los pequeños y medianos productores de leche del país”, afirmó el
dirigente Álvaro González Muñoz.
Preocupado,
el líder del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche agrega
al escenario la negativa del director de LICONSA para ayudar a los ganaderos
del sector social, que por ese motivo demandan su renuncia, pues Héctor Pablo
Ramírez Puga les ha provocado pérdidas por casi 600 millones de pesos y
orillado a la quiebra a más de 20 mil establos. Comentó que debido a la mala
administración de Liconsa, no se podrá cumplir con los objetivos trazados por
el presidente de le República, Enrique Peña Nieto.
González Muñoz relata que en el
mundo han caído los precios de sueros, leche en polvo descremada, de la que
México tiene el nada honroso papel de ser el campeón mundial de las
importaciones. En enero de 2014 el costo traducido a un litro era de 6 pesos y
hoy llega apenas a la mitad. Po consiguiente, los industriales pagan menos a
los productores y les compran menos por la abundancia láctea en el país, situación
que se puede agravar si la industria prefiere seguir apoyando a lecheros del
extranjero.
Para el dirigente, es inadmisible
que en un país como México, que es el octavo mercado mundial en el consumo de
leche, se importe el 40% de la demanda, equivalente a 15 millones de litros
diarios, y que los productores mexicanos “no tengamos a quién vender”.
Lo peor, acusa, es que se importan
“porquería” que se venden en las grandes cadenas comerciales como leches que no
son leche. Y lo mismo pasa con los yogurts, quesos o cremas. Además de que los
convenios de compra con la empresa no se han cumplido.
González Muñoz denuncia, en
entrevista, que LICONSA perdió la dirección desde el año pasado: incumplió
convenios con productores, disminuyó en algunos estados la compra de leche, a
pesar de un presupuesto mayor a 2013, incrementó la red de acopio, pero los
gerentes estatales advierten que ante la falta de presupuesto, entre otras
razones, disminuirán las compras.
Sólo que todo esto no concuerda con
lo que sucede, ya que si lo s precios van a seguir bajos, se presume un ahorro
aproximado de 30 mil pesos por tonelada y la paraestatal compra hasta 40 mil
toneladas anuales.
El líder señala que sólo en enero se
ha importado leche en polvo descremada que, ya rehidratada, equivale a 433
millones de litros. Tal realidad no deja más a los productores que pedir al
gobierno federal en este mes de enero.
Sobre todo, exige el dirigente,
analizar la posibilidad de implementar un plan emergente de secado de leche
fresca, pero sin los errores del anterior que más bien pareció parece una
transferencia de recurso, dice, a nuestro nombre para una parte de la
industria.
“No estamos muy convencidos, pero en
una emergencia todo es bueno. El programa necesita ser operado por SAGARPA y su
padrón de productores, más el de LICONSA, no deberán estar integrados con
la industria. Con esto se puede evitar que 2 millones de litros diarios de
leche se vayan a las coladeras, en la temporada difícil, con el consecuente
sacrificio de unas 100 mil vacas productoras”, concluye el dirigente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario