· El machismo sigue arraigado en la zona alta
de Tapachula.
Laura
Ruiz Espinosa.
Tapachula,
Chis; AGO. 20 (interMEDIOS).- La Regidora Presidenta de la comisión sobre
los Asuntos Indígenas de Tapachula, María González González lamentó que en
pleno siglo XXI aun se puede percibir que las personas del género femenino
pertenecientes a algunos grupos, además de sufrir a consecuencia del machismo,
también pueden ser objeto de múltiples formas de discriminación por otras
razones, como la raza, el origen étnico, la religión, la discapacidad, la edad,
la clase, la casta u otros factores.
La
integrante del Cabildo tapachulteco expresó que esta situación que aun se vive
en la zona alta de Tapachula, ya que esa discriminación puede afectar a estos
grupos de mujeres principalmente, en diferente medida o en distinta forma que
los hombres, pues el machismo es un mal que se adopta de generación en
generación en las comunidades rurales del municipio, aunado a la carencia de
cultura en la denuncia hacia la violencia familiar.
“El
hombre es muy machista en estas comunidades, tiene el mando sobre la mujer,
porque lo que el hombre diga eso se tiene que hacer, en la zona alta del
municipio es así, por eso nosotros trabajamos para disminuir estos problemas
sociales, porque es momento de que la mujer también pueda decidir, de hacer
respetar sus valores y estamos logrando que algunas personas del género
femenino ya son capaces de ser participes en algunas decisiones familiares”,
detalló.
Expresó
que es necesario que las instancias municipales, estatales y federales adopten
determinadas medidas especiales para eliminar las formas múltiples de
discriminación contra la mujer y las consecuencias negativas, pues enfrentan
dos estratos de discriminación desde que nacen, el primero por pertenecer a su
grupo racial y étnico, conjuntamente la segunda razón por su sexo, por ende, al
estar expuestas históricamente a dos formas de discriminación, son doblemente
vulnerables a ser abusadas y victimizadas.
González
González afirmó que por el miedo que tienen las mujeres al denunciar a su
agresor, simplemente no lo hacen, ya que los hombres las tienen amenazadas,
donde mencionó que también se incurre en otro tipo de violencia, no solo
física, social, psicológica, económica, sino a veces hasta sexual, problemas
que en determinado momento pueden causar hasta la muerte en las mujeres de la
comunidad indígena, ubicados en la zona alta del municipio. (interMEDIOS rrc).