∙ MVC y 17 alcaldes de
municipios indígenas firman pacto
∙ Se fundamenta en tres
principios: cultura de la paz; prevención del delito y respeto a la diversidad
Durante
una visita al municipio de Tenejapa, el gobernador Manuel Velasco Coello
suscribió, junto a 17 alcaldes de la región Altos Tsotsil Tseltal, el pacto que
reafirma la vocación de los pueblos y comunidades indígenas de Chiapas, a favor
de la paz y el respeto a los derechos humanos.
El
mandatario chiapaneco, acompañado de Juan Óscar Trinidad Palacios, presidente
de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) detalló que el Pacto por la
No Agresión y Violencia, y el Respeto de los Derechos Humanos en las Comunidades
Indígenas, promueve los derechos individuales de todas y todos los chiapanecos,
a fin de hacer efectivos otros derechos de carácter colectivo.
Ante
alcaldes de municipios indígenas de la región Altos Tsotsil Tseltal que
suscribieron el acuerdo, Velasco Coello destacó que su gobierno trabaja de
manera decidida para entregar a las familias indígenas y de todas las regiones,
un Chiapas próspero y digno para vivir, fomentando el progreso del estado
mediante la paz, la concordia y el respeto de los estatutos legales,
económicos, sociales y ambientales en cada comunidad.
En
este sentido, el mandatario explicó que este pacto está basado en tres principios:
La cultura de la paz; la prevención del delito; y el respeto a la diversidad.
El
primer principio, explicó, busca promover la armonía entre las comunidades, con
diálogo permanente para lograr la unidad que coadyuve a fortalecer el
desarrollo integral de las comunidades indígenas; el segundo impulsa el trabajo
conjunto entre el poder judicial y las autoridades comunitarias para prevenir
el delito, apoyando la distensión de los conflictos con apego a derecho; y el
tercero hace un llamado a respetar por igual a mujeres y hombres, difundiendo el respeto por la diversidad de creencias
políticas, religiosas e ideológicas.
En este sentido, se acordó
incluir ocho compromisos:
Propiciar
armonía en las comunidades; solución pacífica de conflictos; reforzar la
seguridad; respeto a integridad física de las personas; fortalecer la equidad
de género y los derechos de las mujeres indígenas; respeto a la diversidad;
coordinación entre autoridades, y colaboración con la CEDH.
Velasco
Coello agregó que la firma de este pacto es un paso muy importante para Chiapas
en la búsqueda inaplazable de proteger a la persona como individuo y como
componente de un grupo social, hecho que contribuye a una mejor y mayor
eficacia en la defensa de la dignidad y la libertad del ser humano.
"Estoy
convencido que la cultura de los pueblos indígenas de Chiapas es una cultura a
favor de la paz, que con la ayuda de las comunidades indígenas podemos avanzar
para que la ley sea respetada sin distingo y para que la justicia esté al
alcance de todas y todos los habitantes, sin excepción", destacó el
Gobernador.
Ante
cientos de mujeres y hombres indígenas, el Ejecutivo estatal argumentó que los
avances en la democracia se logran privilegiando el respeto y la protección de
los derechos humanos de la población; la formación de una ciudadanía
participativa y con corresponsabilidad social que aporte a la cohesión y
reconstrucción del tejido social, impulsándose con ello un nuevo ambiente de
convivencia.
El
mandatario chiapaneco indicó que la administración estatal suma esfuerzos,
voluntades y recursos con el Gobierno Federal y los gobiernos municipales para
diseñar e implementar estrategias que garanticen a las familias acceder a una
mejor salud, educación, vivienda, infraestructura carretera y urbana, así como
el respeto a sus expresiones culturales, para lograr una sociedad justa,
equitativa e incluyente.
Durante
su participación, el Presidente de la CEDH indicó que la realización de este
pacto refleja la voluntad y el deseo de todas las autoridades políticas, religiosas
y tradicionales de los pueblos indígenas de lograr una hermandad y reencuentro
de respeto íntegro entre las razas y tradiciones que se encuentran regidas por
costumbre ancestrales, enmarcando una nueva etapa de convivencia humana en el
mundo indígena de Chiapas.
El
Ombudsman en el estado sostuvo que la institución que preside es gestora de los
deseos de las comunidades y trabaja con la responsabilidad y el compromiso de
cuidarlos y defenderlos cuando existan diferencias internas entre gobernantes y
ciudadanos, siendo un lazo de comunicación con todas las autoridades para
procurar el respeto bilateral entre las y los integrantes de la sociedad.
Al
hacer uso de la palabra, Esteban Guzmán Jiménez, presidente
municipal de Tenejapa, en representación de los alcaldes, dijo que es momento
de enterrar las malas costumbres y conservar las buenas, es por ello que se
deliberó entre los pueblos indígenas de Chiapas llegar a un acuerdo para lograr
la seguridad de las familias, mediante un ambiente de total conocimiento y
respeto absoluto de los derechos de los demás y la solución de conflictos de
manera pacífica.
En este contexto, el Gobernador apuntó
que estas acciones ponen en manifiesto que se están tomando medidas proactivas
y visionarias para reforzar el estado de derecho y los esquemas de
gobernabilidad, posicionando el respeto mutuo como piedra angular de la
protección de la identidad, la tierra y las costumbres de cada uno de los
pueblos indígenas de Chiapas.
Asimismo,
Velasco Coello anunció que se activarán programas permanentes para prevenir
conflictos y fomentar el respeto entre las comunidades, así como el
fortalecimiento de las instituciones de justicia y de seguridad en los
municipios indígenas, con pleno respeto a sus tradiciones y culturas.
Finalmente,
el mandatario hizo un llamado a honrar este pacto y privilegiar el diálogo, el
respeto y la voluntad, a fin de mantener la paz social y la grandeza de todos
los pueblos indígenas.
El
pacto fue firmado por los presidentes municipales de: Aldama, Amatenango del
Valle, Chalchihuitán, San Juan Chamula, Chanal, Chenalhó, Huixtán, Larráinzar,
Mitontic, Oxchuc, Pantelhó, San Cristóbal de Las Casas, San Juan Cancuc, Santiago
El Pinar, Teopisca, Tenejapa y Zinacantán.